TODO SOBRE EL PROGRAMA BASURINES EN CLAROMECO
Un Faro para los jóvenes
El dispositivo para niñeces y adolescencias Faros, que depende de la Secretaría de Desarrollo Social, viene generando interesantes propuestas para la construcción de una identidad comunitaria. Hace pocas semanas, lanzaron un nuevo programa: Basurines, en el que un grupo de adolescentes confecciona y realiza la venta de estos productos
Desde la mirada de un adolescente, que el lugar que ama lo aloje en su subjetividad y en cada etapa de la vida, es posible gracias a todos y cada uno de los espacios que transita, desde el jardín de infantes hasta esta etapa que define su identidad. Hoy en Claromecó, “Faros” es ese espacio que mira al futuro y construye en comunidad para los jóvenes.
Para la Secretaría de Desarrollo Social del municipio, lugar del cual depende este dispositivo, el propósito de Faros es que el crecimiento y desarrollo de los niños y adolescentes sea más simple. Por eso, fomentan estos espacios comunitarios que acompañan sus intereses y necesidades.
Para continuar con la tarea y convocando a la participación de los jóvenes, desde hace algunas semanas lanzaron un nuevo proyecto dentro de la fundación: la confección y venta de basurines para la comunidad. “Es un amplio dispositivo, del área de Niñez Adolescencia y Familia, que gracias al trabajo de los adolescentes que lo conforman y le dan vida, hoy llega a las casas de cada uno de los claromequenses. Nada más ni nada menos, que embelleciendo el espacio público de la comunidad”, destacan desde la secretaría.
Los asistentes al espacio de intercambio de Faros “comenzaron con la producción de basurines mediante un trabajo intersectorial e integrado, pensado desde la interacción del municipio, mediante la Secretaría de Desarrollo Social, Planeamiento Urbano, la Dirección de Gestión Ambiental y Obras particulares. Esto marca un importante trabajo de proyección para detectar una necesidad y viabilizar los instrumentos del Estado para resolver una problemática como lo es el desarrollo y embellecimiento urbano planificado y organizado”, aseguran.
En este sentido, explican que “se fortalece el saber hacer de los jóvenes y se resuelve una necesidad de los vecinos y vecinas, que tiene a bien responder para la habilitación de las nuevas obras –puesto que es un requerimiento para la finalización de obra que otorga el municipio-. Además, se suma el trabajo de Gestión Ambiental, en cuanto al cuidado de los recursos naturales y las técnicas de producción que deben utilizarse”.
Los referentes del programa destacan “la colaboración de todos los intervinientes para que ‘Basurines’ se lleve adelante, ya que la primera compra de materiales la realizó la delegación de Claromecó. Luego de completada la primera línea de producción y circuito de venta, ya se calculan los costos y prevén lo necesario para la siguiente compra de insumos”, es decir, el programa es autosustentable.
Además, “estamos muy contentos como grupo porque ‘Basurines’ está funcionando en todas las etapas del circuito, como lo son capacitación, producción y venta”. Esto funciona como una herramienta de fortalecimiento de los lazos de los jóvenes con su comunidad, asumiendo un compromiso con un espacio y fomentando la cultura del trabajo. “Conformamos un emprendimiento genuino que ya está generando ingresos para los asistentes al taller de carpintería de Faros, que hoy se están enfocando en perfeccionar las diferentes técnicas de producción, armado y venta de los basurines”.
Desde el inicio de este nuevo dispositivo dentro de Faros, hace poquitas semanas, hasta el momento “estamos cumpliendo ampliamente con los objetivos, no solo de ser un espacio pensado para incluir, acompañar y fortalecer los lazos sociales, sino también un espacio donde sentirse parte, construir vínculos y desarrollar habilidades”, destacando además que la tarea lleva a los jóvenes a “tomar contacto con los vecinos y vecinas desde la comercialización, y permite embellecer el espacio urbano de Claromecó”.
Una luz para niños y niñas
Faros se inicia con un abordaje territorial desde la Secretaría de Desarrollo Social. En este acercamiento a los jóvenes, se detecta la necesidad de generar espacios de cuidados para esta franja etaria en la localidad. Pero también son los más pequeños los que necesitan contar con actividades comunitarias, por eso la fundación funciona como un espacio de encuentro, con distintas propuestas, con las infancias y adolescencias en el centro de la escena, “que permita tejer redes que ofrezcan cuidado, escucha y contención. En relación a las niñas y niños, se trabaja con talleres de música, apoyo escolar, juegos malabarísticos, cerámica, bijouterie y fútbol. En cuanto a los y las adolescentes, se aborda desde la prevención de consumos problemáticos hasta la generación de espacios terapéuticos y de inclusión social y laboral”, remarcan.
La metodología de trabajo “es la convocatoria a los jóvenes desde sus propios intereses, sumando a sus familias y referentes significativos. De esta forma, se promueve el acceso a la salud, el trabajo articulado entre actores locales y la construcción colectiva de políticas públicas que garantizan derechos y oportunidades para la comunidad”.
Faros hoy cuenta con una asistencia de 37 personas que activamente, y de acuerdo a sus intereses, participan de distintas actividades que forman parte de la vida de la comunidad, tal como el Festival del Día de la Niñez, el Encuentro Fungi, y numerosas propuestas que surgen durante el año. “En este momento se está trabajando para poner en marcha, en un futuro cercano, en conjunto con la Dirección de Turismo y la Escuela, capacitaciones para que puedan gestionarse como promotores turísticos de la localidad y de sus bellezas naturales”.
Un espacio de oportunidades
Faros, como su nombre lo indica, mira al futuro, como luz que guía. Es un lugar de encuentro y orientación para estos jóvenes, un espacio para constituir el lazo junto al otro, que facilite y promueva el acceso a las oportunidades. “Justamente con esa filosofía se crea Faros, a raíz de la inquietud y el trabajo sostenido del secretario de Desarrollo Social, Martin Garate, que a pocos días de inicio de gestión llegó a Claromecó para charlar con los vecinos y vecinas sobre sus inquietudes y, sobre todo, para aunar criterios y apuntalar estrategias que permitan llevar adelante todos los espacios de encuentro que sean necesarios para construir políticas públicas integrales, que impacten directamente para mejorar la calidad de vida de los claromequenses”, señalan desde la secretaría.
“Ese mismo día marcó lineamientos claros y específicos a su equipo para que priorice este trabajo. En ese momento, el equipo de Niñez, Adolescencia y Familia comenzó a plantear estrategias, buscar espacio físico y comenzar el relevamiento en terreno para gestar oportunidades, para conocer a la comunidad de niños, niñas y adolescentes, sus intereses, sus necesidades”. Luego de conformado el equipo de trabajo, se comenzó “a ponerle amor a la casita lindante con el Hospitalito”, que hoy ya es identificada por todos como la sede de Faros y donde se están sembrando lazos “que estamos seguros que perdurarán”.
Los profesionales a cargo, aprovechan este espacio para “agradecer al Ente Descentralizado, a la Secretaría de Planeamiento Urbano, Obras Particulares, Desarrollo Ambiental y Desarrollo Social, que sin su trabajo, Basurines no habría llegado a ser un emprendimiento con salida laboral como lo es hoy. Por supuesto a Martin Garate, que no solo dio el puntapié inicial, sino que sostiene esta metodología de trabajo y a todos los dispositivos de protección, prevención y promoción de derechos que funcionan bajo la órbita de la Secretaria de Desarrollo Social -que son más de 10- y que acompañan de forma cercana, empática a los niños, niñas y adolescentes de cada una de las comunidades donde se desarrollan”.
Hoy, desde la secretaría, manifiestan estar “muy felices por el camino transitado, la progresión y el éxito de Faros, pero todos los dispositivos en implementación están cumpliendo ampliamente los objetivos, trazados por los equipos técnicos, que están coordinados por profesionales con vasta experiencia y especialización en el campo de la Ley de Promoción y Protección Integral de los Derechos de Niños, Niñas y Adolescentes (Ley Nacional 26061, Ley provincial 13298)”, que reglamentan el trabajo de los espacios comunitarios mencionados.
¿Cómo conseguir tu basurín?
Desde la fundación, comunican que “si vivís en Claromecó o tenés casa en la localidad y querés adquirir tu basurín, comunícate con Faros al 2983-693875 y construí y consolida oportunidades para los jóvenes que disfrutan de su trabajo y crean con sus propias manos un mejor futuro y un espacio público más bello”.